Medicación
Los agonistas de la dopamina son el tratamiento de primera línea para reducir los niveles de prolactina y abordar las causas subyacentes. Entre los medicamentos habituales se incluyen:
Cabergolina (Dostinex)
Muy práctica y con menos efectos secundarios, a menudo se prescribe para uso a largo plazo.
Bromocriptina (Parlodel)
Otra opción eficaz, sobre todo para pacientes que pueden ser sensibles a otros medicamentos.
Terapia hormonal
Para los pacientes con hipotiroidismo, la terapia de sustitución de la hormona tiroidea puede normalizar los niveles de prolactina.
Intervención quirúrgica
La cirugía puede ser necesaria en prolactinomas grandes o resistentes que no responden a la medicación.
Se utilizan técnicas mínimamente invasivas para garantizar una recuperación más rápida y unas complicaciones mínimas.