Realizamos una serie de pruebas diagnósticas para evaluar la salud reproductiva:
Para las mujeres: Pruebas como la sonohisterografía o la histerosalpingografía (HSG) evalúan la salud uterina y tubárica. También se realizan evaluaciones hormonales para calibrar la reserva ovárica y la función reproductora.
Para los hombres: El análisis del semen determina el recuento, la movilidad y la calidad de los espermatozoides.

Si es necesario, se incorporan técnicas avanzadas como la ICSI para mejorar las tasas de fecundación. Estas pruebas garantizan un enfoque bien informado del tratamiento, identificando los posibles obstáculos en una fase temprana del proceso.

Mediante inyecciones hormonales, se estimulan los ovarios para que produzcan múltiples óvulos. Los análisis de sangre y las ecografías regulares controlan el crecimiento de los folículos para ajustar la medicación y lograr resultados óptimos. Esta fase se gestiona cuidadosamente para minimizar los riesgos, como el Síndrome de Hiperestimulación Ovárica (SHO), garantizando la seguridad de la paciente en cada paso.

Una vez que los óvulos están maduros, se extraen mediante un procedimiento mínimamente invasivo bajo sedación. Este proceso utiliza la guía ecográfica para recoger los óvulos de forma segura y eficaz. Las pacientes suelen recuperarse rápidamente, y la intervención se realiza en nuestras modernas instalaciones.

Los óvulos recuperados se combinan con espermatozoides en nuestro avanzado laboratorio. Dependiendo de la calidad del esperma, se utiliza la fecundación estándar o la ICSI. Los óvulos fecundados se controlan mientras se convierten en embriones, y nuestros embriólogos utilizan técnicas avanzadas para seleccionar los embriones más sanos para la transferencia.

Se seleccionan los embriones más sanos para transferirlos al útero. Este procedimiento es sencillo y no suele requerir sedación. Los embriones restantes pueden congelarse para su uso futuro, ofreciendo oportunidades adicionales de embarazo.

Tras la transferencia, los suplementos de progesterona ayudan al revestimiento uterino para la implantación. Se realiza una prueba de embarazo 10-14 días después para confirmar el éxito. Nuestro equipo proporciona orientación y apoyo completos durante este periodo de espera.