Evaluación previa al procedimiento
- Pruebas hormonales, incluidos los niveles de FSH, LH y estradiol, para evaluar la función ovárica y determinar el mejor momento para el tratamiento.
- Ecografía para evaluar la salud del útero y los ovarios e identificar cualquier anomalía, como fibromas o quistes.
- Pruebas de detección de enfermedades infecciosas para ambos miembros de la pareja, a fin de garantizar un entorno de tratamiento seguro, incluidas las pruebas del VIH, la hepatitis B/C y la sífilis.
- Análisis del semen para evaluar el recuento, la movilidad y la morfología de los espermatozoides, asegurando que la muestra es adecuada para la IIU.
Preparación
Pueden recetarse medicamentos para la fertilidad, como clomifeno o gonadotropinas, para estimular la producción de óvulos y mejorar la ovulación.
A la recogida de esperma le sigue un proceso de «lavado» para eliminar impurezas y concentrar los espermatozoides más sanos para la inseminación.
Procedimiento IIU
Realizado en un entorno clínico, el esperma preparado se introduce a través de un catéter fino y flexible directamente en el útero durante la ventana ovulatoria de la mujer.
El procedimiento es rápido, normalmente indoloro y no requiere anestesia. Las pacientes pueden experimentar calambres leves similares a los de una citología vaginal.
Después del procedimiento
Se aconseja a las pacientes que descansen brevemente tras la intervención y que reanuden sus actividades normales poco después. Se programa una cita de seguimiento aproximadamente dos semanas después para confirmar el éxito del embarazo.